El video explicativo se ha convertido en una de las herramientas más poderosas del marketing actual. ¿Por qué? Porque combina lo visual con lo emocional, y tiene la capacidad de simplificar conceptos complejos en pocos segundos. Pero no basta con hacer “un video bonito”: si no se ejecuta bien, puede ser una pérdida de tiempo y presupuesto.
A continuación, te compartimos los errores más comunes que vemos en la producción de videos explicativos y, más importante aún, cómo evitarlos para lograr un contenido que realmente conecte, informe y convierta.
1. No tener claro el objetivo del video
Parece obvio, pero muchas veces se empieza a producir sin una meta clara. ¿Quieres generar leads? ¿Explicar cómo funciona tu producto? ¿Mejorar el onboarding? Cada objetivo requiere un enfoque diferente.
Cómo evitarlo: Antes de escribir una sola línea de guion, define qué acción esperas del espectador al finalizar el video. Eso te ayudará a estructurar mejor el mensaje y medir el éxito real del contenido.
2. Contar demasiado (o muy poco)
Un error común es intentar meterlo TODO en un solo video. Resultado: abrumas al espectador. En el otro extremo, hay quienes se quedan demasiado cortos, dejando más preguntas que respuestas.
Cómo evitarlo: Apunta a un video de entre 60 y 90 segundos. Es tiempo suficiente para captar la atención, explicar lo esencial y motivar una acción. Si necesitas más profundidad, considera una serie de videos.
3. Ignorar el guion y saltar directo a producir
Es tentador pasar directamente a la parte visual, pero sin un guion sólido, el video pierde dirección y claridad.
Cómo evitarlo: Dedica tiempo a escribir un guion claro, estructurado y centrado en el espectador. Piensa en tono, ritmo y claridad del mensaje. Es la base de todo.
4. Diseño visual sin coherencia con la marca
Un video puede ser visualmente atractivo, pero si no refleja la identidad de la marca, pierde impacto y reconocimiento.
Cómo evitarlo: Usa los colores, tipografías y estilo gráfico de tu marca. El video debe sentirse como una extensión natural de tu comunicación corporativa.
5. No pensar en la audiencia
A veces se cae en la trampa de hablar desde la marca y no para quien realmente lo va a ver. Si usas tecnicismos, referencias internas o un tono que no conecta, el mensaje se diluye.
Cómo evitarlo: Ten siempre presente a tu buyer persona. ¿Qué lenguaje usa? ¿Qué le preocupa? ¿Qué busca resolver? Habla su idioma y adapta el contenido a su realidad.
6. Llamados a la acción poco claros o inexistentes
Después de ver el video, ¿qué tiene que hacer el espectador? Si no se lo dices, probablemente no haga nada.
Cómo evitarlo: Incluye un CTA directo y específico: “Solicita una demo”, “Descarga la guía”, “Agenda una llamada”. El cierre debe ser claro, persuasivo y alineado con el objetivo del video.
7. Descuidar la calidad del audio y la narración
Un buen diseño visual no puede compensar un mal audio o una voz poco convincente. El sonido es más importante de lo que muchos creen.
Cómo evitarlo: Invierte en una buena locución profesional y asegúrate de que la música y efectos acompañen, no distraigan. El audio es clave para mantener la atención y transmitir confianza.
En resumen
Un video explicativo puede ser una herramienta muy poderosa… o un desperdicio de recursos si no se ejecuta bien. Evitar estos errores comunes marcará la diferencia entre un contenido que simplemente “se ve bien” y uno que realmente convierte y aporta valor.
¿Estás pensando en producir un video explicativo para tu marca? Contar con una productora especializada puede ayudarte a evitar estos errores desde el inicio y asegurarte un resultado profesional, alineado con tus objetivos de marketing.
